Al menos cuatro accidentes entres martes y miércoles con seis lesionados
Entre las 11.50 de la mañana de ayer martes y hoy miércoles a las 18 se registraron al menos emergencias que demandaron la intervención de policías y ambulancias, entre accidentes y casos de atención de salud como el sucedido en un Jardín de Infantes el martes en los primeros minutos de la tarde.
El primero de esta estadística fue en avenida San Martín y Belgrano que demandó el trabajo de dos ambulancias de la empresa Intermed para atender a los heridos de esta colisión en un lugar estratégico y complejo de la ciudad donde una mujer que iba en moto se encontraba muy dolorida. La segunda ambulancia debió asistir a otra joven que también iba en moto y colisionaron contra un vehículo. Esta colisión dejó al menos tres personas con lesiones.
A las 13.04 del martes se registró una emergencia de salud en el Jardín de Infantes ubicado en calle José Hernández a la vuelta de la Escuela 8 y en donde un niño fue asistido estando presente su mamá.
A las 20.40 del martes se registró una caída de moto donde una joven motociclista cayó de su motovehículo aparentemente tras ser "encerrada" por un automóvil y no pudo maniobrar correctamente debido al estado resbaladizo de la calle. Esto ocurrió en calle Primera Junta a metros del cruce con calle Alvear frente al polideportivo "Beto Mesa".
A las 11.35 de este miércoles se registró otro accidente entre auto y moto. La tercera colisión en 24 horas,
Minutos antes de las 18 del miércoles se registró el cuarto accidente en dos días. Fue en la avenida Circunvalación a la altura de calle Ricardo Rojas en proximidades del complejo Marianista y en este caso los involucrados fueron un automóvil y una bicicleta.
Al lugar concurrieron dos ambulancias de Intermed -una de ellas, la primera, justo pasaba por el lugar del choque, mientras la segunda era la ambulancia que fue comisionada específicamente para el sitio- pero debieron atender al ciclista que fue uno de los protagonistas de la colisión, que fue trasladada para control en el Hospital Interzonal de Agudos.
Entre las 11.50 de la mañana de ayer martes y hoy miércoles a las 18 se registraron al menos emergencias que demandaron la intervención de policías y ambulancias, entre accidentes y casos de atención de salud como el sucedido en un Jardín de Infantes el martes en los primeros minutos de la tarde.
El primero de esta estadística fue en avenida San Martín y Belgrano que demandó el trabajo de dos ambulancias de la empresa Intermed para atender a los heridos de esta colisión en un lugar estratégico y complejo de la ciudad donde una mujer que iba en moto se encontraba muy dolorida. La segunda ambulancia debió asistir a otra joven que también iba en moto y colisionaron contra un vehículo. Esta colisión dejó al menos tres personas con lesiones.
A las 13.04 del martes se registró una emergencia de salud en el Jardín de Infantes ubicado en calle José Hernández a la vuelta de la Escuela 8 y en donde un niño fue asistido estando presente su mamá.
Al lugar concurrieron dos ambulancias de Intermed -una de ellas, la primera, justo pasaba por el lugar del choque, mientras la segunda era la ambulancia que fue comisionada específicamente para el sitio- pero debieron atender al ciclista que fue uno de los protagonistas de la colisión, que fue trasladada para control en el Hospital Interzonal de Agudos.
Fusionaron la Jefatura Distrital con el Comando de Patrullas
El encargado de anunciar los cambios fue el Comisario General Rubén Rojo, superintendente de seguridad, región interior norte. La nueva dependencia quedará a cargo del comisario Facundo Mantegazza. El secretario de seguridad, Fabián Claudio, acompañó el anuncio.
Rojo confirmó que, "a partir de hoy y por disposición del Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires, se ha dispuesto la fusión de la jefatura distrital con la división comando de patrulla de Junín. Quien estaba a cargo del comando, comisario Facundo Mantegazza, será quien quede como titular de esta nueva estructura y tendrá a cargo el funcionamiento de las comisarías, destacamentos y puestos de vigilancia y disposición de toda la logística, tarea que será monitoreada por la jefatura departamental, a cargo del comisario mayor Walter Feletto, juntamente con la secretaría de seguridad, el poder judicial y todos aquellos que trabajan por la seguridad y la prevención en esta ciudad".
Consultado lo que se busca con esta nueva reestructuración, el superintendente de seguridad, región interior norte, explicó: "Lo que se busca es unificar la comandancia en los distritos donde hasta hoy, funcionaban dos jefes. Buscamos unificar criterios de conducción para evitar superposición de tareas, ahora, se centra todo en un jefe, supervisado, como dije, por el jefe departamental, la superintendencia, el ministerio y la secretaría de seguridad con quienes permanentemente llevamos a cabo políticas públicas de prevención y asistencia para el vecino de Junín".
Por su parte, Fabián Claudio, secretario de Seguridad del Gobierno de Junín, valoró esta medida porque "viene a mejorar la seguridad del vecino de Junín. Desde un inicio de la gestión del Intendente Pablo Petrecca, se asumió la responsabilidad de trabajar mancomunadamente con la policía y la justicia para una mejor seguridad en nuestra ciudad. En ese camino seguimos trabajando, articulando políticas de prevención y dotando a la policía de todas las herramientas necesarias para que el vecino se sienta cada día más seguro. Esta medida, ya consensuada y estudiada, apunta a eso, a mejorar el desarrollo de la función preventiva de la policía".
El encargado de anunciar los cambios fue el Comisario General Rubén Rojo, superintendente de seguridad, región interior norte. La nueva dependencia quedará a cargo del comisario Facundo Mantegazza. El secretario de seguridad, Fabián Claudio, acompañó el anuncio.
Rojo confirmó que, "a partir de hoy y por disposición del Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires, se ha dispuesto la fusión de la jefatura distrital con la división comando de patrulla de Junín. Quien estaba a cargo del comando, comisario Facundo Mantegazza, será quien quede como titular de esta nueva estructura y tendrá a cargo el funcionamiento de las comisarías, destacamentos y puestos de vigilancia y disposición de toda la logística, tarea que será monitoreada por la jefatura departamental, a cargo del comisario mayor Walter Feletto, juntamente con la secretaría de seguridad, el poder judicial y todos aquellos que trabajan por la seguridad y la prevención en esta ciudad".
Consultado lo que se busca con esta nueva reestructuración, el superintendente de seguridad, región interior norte, explicó: "Lo que se busca es unificar la comandancia en los distritos donde hasta hoy, funcionaban dos jefes. Buscamos unificar criterios de conducción para evitar superposición de tareas, ahora, se centra todo en un jefe, supervisado, como dije, por el jefe departamental, la superintendencia, el ministerio y la secretaría de seguridad con quienes permanentemente llevamos a cabo políticas públicas de prevención y asistencia para el vecino de Junín".
Por su parte, Fabián Claudio, secretario de Seguridad del Gobierno de Junín, valoró esta medida porque "viene a mejorar la seguridad del vecino de Junín. Desde un inicio de la gestión del Intendente Pablo Petrecca, se asumió la responsabilidad de trabajar mancomunadamente con la policía y la justicia para una mejor seguridad en nuestra ciudad. En ese camino seguimos trabajando, articulando políticas de prevención y dotando a la policía de todas las herramientas necesarias para que el vecino se sienta cada día más seguro. Esta medida, ya consensuada y estudiada, apunta a eso, a mejorar el desarrollo de la función preventiva de la policía".
Conflicto salarial: Ediles de Cambiemos se opusieron a que funcionarios den informes al Concejo
Con la presencia de 17 concejales se llevó a cabo este mediodía una sesión extraordinaria para tratar la citación a los secretarios de Hacienda, Ariel Díaz y al de Coordinación, Martín Beligni para que informen acerca de la negociación que vienen manteniendo con los sindicatos y empleados municipales.
"Hemos solicitado al intendente la urgente solución al conflicto", dijo el concejal lautaro Mazzutti (Unidad Ciudadana) quien además puntualizó que "siempre escuchamos a los funcionarios diciendon que los empleados eran el motor de la gestión, pero a ese motor hay que echarlña agua, aceite, combustible. Si no se los valoriza, el motor no va a andar y como consecuencia la gestión va a entrar en problemas como es lo que estamos viendo", indicó.
A estos conceptos los adhirió la presidenta del bloque de concejales del Frente Renovador Carolina Echeverría.
La sesión efectuada en el Salón Azul, contó también con la presencia de dirigentes sindicales representativos de los municipales.
Finalmente el tema no fue aprobado por no alcanzar los dos tercios necesarios. Esto fue rechazado también por los dirigentes sindicales y empleados municipales presentes en el recinto.
VIDEOS DE LO SUCEDIDO ESTE MEDIODIA EN EL SALON AZUL DEL CONCEJO DELIBERANTE
Con la presencia de 17 concejales se llevó a cabo este mediodía una sesión extraordinaria para tratar la citación a los secretarios de Hacienda, Ariel Díaz y al de Coordinación, Martín Beligni para que informen acerca de la negociación que vienen manteniendo con los sindicatos y empleados municipales.
"Hemos solicitado al intendente la urgente solución al conflicto", dijo el concejal lautaro Mazzutti (Unidad Ciudadana) quien además puntualizó que "siempre escuchamos a los funcionarios diciendon que los empleados eran el motor de la gestión, pero a ese motor hay que echarlña agua, aceite, combustible. Si no se los valoriza, el motor no va a andar y como consecuencia la gestión va a entrar en problemas como es lo que estamos viendo", indicó.
A estos conceptos los adhirió la presidenta del bloque de concejales del Frente Renovador Carolina Echeverría.
La sesión efectuada en el Salón Azul, contó también con la presencia de dirigentes sindicales representativos de los municipales.
Finalmente el tema no fue aprobado por no alcanzar los dos tercios necesarios. Esto fue rechazado también por los dirigentes sindicales y empleados municipales presentes en el recinto.
VIDEOS DE LO SUCEDIDO ESTE MEDIODIA EN EL SALON AZUL DEL CONCEJO DELIBERANTE
Asfixia por sofocación fue la causa de la muerte de Ludmila
El cuerpo presentaba múltiples lesiones producidas por filos y golpes con elementos contundentes. En la cabeza se constataron 16 lesiones.
La doctora Carolina Pérez Mernes, es integrante del equipo de investigación forense del departamento judicial Junín y participó de la operación de autopsia en el cadáver de Ludmila Bazán que se extendió por dos horas y cuarenta y cinco minutos, entre las 21 y las 23.45 del lunes 21 de diciembre de 2015, fecha en que fue encontrado el cuerpo sin vida de la joven.
Estaba semidesnuda, con el rostro cubierto por sangre seca. Así llegó a la operación de autopsia en el Instituto Forense que funciona en nuestra ciudad.
La profesional detalló el trabajo realizado, la forma en que se fue realizando la autopsia y los elementos que se iban buscando en los distintos pasos, que incluyó la toma de placas radiográficas para determinar si había huesos rotos, lo que no fue encontrado.
Presentaba múltiples lesiones producidas por filos, por golpes con elementos contundentes, lesión en el ojo izquierdo producto de un golpe, lesiones cortantes en la región frontal izquierda y en la ceja, además de lesiones en la boca y "un gran complejo lesionar contuso cortante que ocupaba casi todo el hemirostro derecho y se superponía con lesiones perforante, una lesión en el ojo derecho, otro en la zona malar. Era un complejo lesionar" describió en su relato la doctora Pérez Mernes ante los jueces integrantes del Tribunal Oral Criminal 1 del Departamento Judicial Junín.
El juicio por el crimen de Ludmila desarrolló su primera jornada este miércoles en la sala de audiencias del cuarto piso del edificio de Tribunales.
El cuerpo presentaba una lesión transversal al cuello de catorce centímetros, muy profunda, que llegaba a los músculos y bazos. En la base del cuello había otras lesiones musculares que se correspondía con otras lesiones encontradas en cuello y esófago.
Todas las lesiones del cuerpo son de carácter vital, es decir ocurridas en vida de la víctima. La causa de la muerte es asfixia por sofocación.
Consultada sobre si hubo agonía, la profesional respondió que "hubo muchas lesiones. Hay un dato fundamental: las manos estaban completamente cubiertas de sangre. tenía las palmas llenas de sangre. Estaba viva", dijo la doctora Pérez Mernes.
El cuerpo presentaba múltiples lesiones producidas por filos y golpes con elementos contundentes. En la cabeza se constataron 16 lesiones.
La doctora Carolina Pérez Mernes, es integrante del equipo de investigación forense del departamento judicial Junín y participó de la operación de autopsia en el cadáver de Ludmila Bazán que se extendió por dos horas y cuarenta y cinco minutos, entre las 21 y las 23.45 del lunes 21 de diciembre de 2015, fecha en que fue encontrado el cuerpo sin vida de la joven.
Estaba semidesnuda, con el rostro cubierto por sangre seca. Así llegó a la operación de autopsia en el Instituto Forense que funciona en nuestra ciudad.
La profesional detalló el trabajo realizado, la forma en que se fue realizando la autopsia y los elementos que se iban buscando en los distintos pasos, que incluyó la toma de placas radiográficas para determinar si había huesos rotos, lo que no fue encontrado.
Presentaba múltiples lesiones producidas por filos, por golpes con elementos contundentes, lesión en el ojo izquierdo producto de un golpe, lesiones cortantes en la región frontal izquierda y en la ceja, además de lesiones en la boca y "un gran complejo lesionar contuso cortante que ocupaba casi todo el hemirostro derecho y se superponía con lesiones perforante, una lesión en el ojo derecho, otro en la zona malar. Era un complejo lesionar" describió en su relato la doctora Pérez Mernes ante los jueces integrantes del Tribunal Oral Criminal 1 del Departamento Judicial Junín.
El juicio por el crimen de Ludmila desarrolló su primera jornada este miércoles en la sala de audiencias del cuarto piso del edificio de Tribunales.
El cuerpo presentaba una lesión transversal al cuello de catorce centímetros, muy profunda, que llegaba a los músculos y bazos. En la base del cuello había otras lesiones musculares que se correspondía con otras lesiones encontradas en cuello y esófago.
Todas las lesiones del cuerpo son de carácter vital, es decir ocurridas en vida de la víctima. La causa de la muerte es asfixia por sofocación.
Consultada sobre si hubo agonía, la profesional respondió que "hubo muchas lesiones. Hay un dato fundamental: las manos estaban completamente cubiertas de sangre. tenía las palmas llenas de sangre. Estaba viva", dijo la doctora Pérez Mernes.
Juicio oral por el homicidio de Ludmila: Cómo fue asesinada y encontrada
Durante la audiencia se conocieron detalles de cómo fue encontrado el cadáver de la joven. La mecánica de su muerte. Presentaba múltiples lesiones golpes, hematomas y rastros del ataque con una piedra de 6 kilos.
El tercer testigo en la primera audiencia del juicio oral por el crimen de Ludmila Bazán, ocurrido el 20 de diciembre de 2015, fue el licenciado doctor Alejandro Doro, perito que trabajó en la escena del crimen y participó también en la autopsia. Como soporte, para mejor comprensión del mecanismo del homicidio, el perito aportó fotografías del cuerpo y la autopsia realizada en el cuerpo de la joven asesinada.
El cuerpo fue encontrado en un basural ubicado en el camino a Agustín Roca, en cercanías de la ruta nacional 188. Antes de llegar al cuerpo fueron encontradas, separadas por dos metros, las alpargatas que calzaba Ludmila. Posteriormente llega al cuerpo que estaba tendido en posición cubito dorsal.
La remera la tenía levantada hasta la mitad del cuerpo y no tenìa colocadas las calzas, que estaban solamente sujetas al tobillo izquierdo y tanto la calza como la bombacha estaban anudadas con evidencias de haber sido bajadas al mismo tiempo. Presentaba múltiples lesiones en cuello y rostro, con lesiones cortantes, golpes, hematomas y hasta presentaba rastros de que podría haber sido golpeada por una piedra de 25 centímetros por 20 centímetros, que se sacó de un hueco. La piedra tenía manchas de sangre, con tierra y hollín en la parte superior. En la parte inferior también tenía rastros de sangre.
Se determinó que no solamente era el lugar de hallazgo del cuerpo, sino también donde se le terminó de dar muerte. Además había un reguero de sangre importante.
El perito realizó un detallado y pormenorizado relato de cómo fue encontrado el cuerpo de Ludmila indicando además que también se hallaron rastros de un ataque sexual en el lugar. La autopsia del cuerpo comenzó a las 21 del lunes, día en que fue encontrado el cadáver de la joven que estaba a seis metros del camino de acceso al basural.
Otro hecho comentado por el perito fue que no presentaba signos en el cuerpo de la víctima de que Ludmila se hubiera podido defender además todo indica que no fue solamente uno el agresor. "Nadie puede agarrar una piedra, sostener a la persona, accesarla carnalmente y apuñalarla todo al mismo tiempo", sostuvo el perito.
"No tenía ningún signo de que el cuerpo haya sido transportado o de arrastre", sostuvo Doro ante el tribunal.
El cuerpo también presentaba signos de asfixia mecánica. Asimismo relató el perito que también se realizaron pericias en la casa en construcción donde vivía el imputado del homicidio y uno de los que está acusado de encubrimiento, secuestrándose, entre los elementos, una campera color crema.
Durante la audiencia se conocieron detalles de cómo fue encontrado el cadáver de la joven. La mecánica de su muerte. Presentaba múltiples lesiones golpes, hematomas y rastros del ataque con una piedra de 6 kilos.
El tercer testigo en la primera audiencia del juicio oral por el crimen de Ludmila Bazán, ocurrido el 20 de diciembre de 2015, fue el licenciado doctor Alejandro Doro, perito que trabajó en la escena del crimen y participó también en la autopsia. Como soporte, para mejor comprensión del mecanismo del homicidio, el perito aportó fotografías del cuerpo y la autopsia realizada en el cuerpo de la joven asesinada.
El cuerpo fue encontrado en un basural ubicado en el camino a Agustín Roca, en cercanías de la ruta nacional 188. Antes de llegar al cuerpo fueron encontradas, separadas por dos metros, las alpargatas que calzaba Ludmila. Posteriormente llega al cuerpo que estaba tendido en posición cubito dorsal.
La remera la tenía levantada hasta la mitad del cuerpo y no tenìa colocadas las calzas, que estaban solamente sujetas al tobillo izquierdo y tanto la calza como la bombacha estaban anudadas con evidencias de haber sido bajadas al mismo tiempo. Presentaba múltiples lesiones en cuello y rostro, con lesiones cortantes, golpes, hematomas y hasta presentaba rastros de que podría haber sido golpeada por una piedra de 25 centímetros por 20 centímetros, que se sacó de un hueco. La piedra tenía manchas de sangre, con tierra y hollín en la parte superior. En la parte inferior también tenía rastros de sangre.
Se determinó que no solamente era el lugar de hallazgo del cuerpo, sino también donde se le terminó de dar muerte. Además había un reguero de sangre importante.
El perito realizó un detallado y pormenorizado relato de cómo fue encontrado el cuerpo de Ludmila indicando además que también se hallaron rastros de un ataque sexual en el lugar. La autopsia del cuerpo comenzó a las 21 del lunes, día en que fue encontrado el cadáver de la joven que estaba a seis metros del camino de acceso al basural.
Otro hecho comentado por el perito fue que no presentaba signos en el cuerpo de la víctima de que Ludmila se hubiera podido defender además todo indica que no fue solamente uno el agresor. "Nadie puede agarrar una piedra, sostener a la persona, accesarla carnalmente y apuñalarla todo al mismo tiempo", sostuvo el perito.
"No tenía ningún signo de que el cuerpo haya sido transportado o de arrastre", sostuvo Doro ante el tribunal.
El cuerpo también presentaba signos de asfixia mecánica. Asimismo relató el perito que también se realizaron pericias en la casa en construcción donde vivía el imputado del homicidio y uno de los que está acusado de encubrimiento, secuestrándose, entre los elementos, una campera color crema.
Crimen de Ludmila: Los testigos fueron narrando detalles de la vida de la joven, los momentos previos del hecho y lo que pasó durante y después
La madre de la víctima contó que la joven era discapacitada y cobraba una pensión, Tenía una hija de 7 años. El empleador de Quiñones Chiñolis dijo que el capataz de la obra le sugirió no decir nada cuando fue llamado a declarar por la policía ante el fiscal.
En el inicio de la parte testimonial del juicio se dio lectura a la declaración de Alberto Quiñones Chiñolis ante el fiscal Terrón, días después del homicidio quien contó que condujo a Ludmila a un domicilio donde la estaban esperando Nuñez Ibarra y González Letih quien discutió con la joven, la empujó, golpeó contra la pared y comenzó a apuñalarla, asustándose los otros dos y decidieron llevarla a un basural. En el lugar, Nuñez Ibarra penetró el cuerpo de la joven ya sin vida y posteriormente se fueron del lugar.
Gonzalez Leith también declaró ante el fiscal idénticas circunstancias pero no acompañó a Nuñez Ibarra y a Quiñones Chiñolis a llevar el cuerpo de Ludmila al basural, sino que se fue a dormir.
Por pedido de la defensa se dieron lectura a declaraciones que oportunamente hicieron los imputados de encubrimiento ante el fiscal Terrón en plena etapa investigativa. El homicidio de Ludmila ocurrió en una vivienda de avenida Padre Respuela al 370 donde vivían -temporariamente- Nuñez Ibarra y González Leith. Ludmila había ido en moto hasta esa dirección, donde concurrió el domingo por la noche. Todos los imputados estaban trabajando en el momento del hecho en una obra en construcción en calle Caseros.
Ludmila, a quien conocían como Lucía, ya era conocida por los hombres imputados en este juicio oral. A ella la llamaron y le enviaron mensajes de textos en esa noche del domingo 20 de diciembre de 2015. El cuerpo de la joven fue encontrado al día siguiente, lunes 21.
Otra de las piezas documentales pedidas por el defensor oficial Silvio Acerbo, quien lleva la causa de Nuñez Ibarra, fue la declaración de su defendido que ya había estado dos veces con Ludmila antes de la fecha de homicidio. En la tarde del domingo 20 de diciembre de 2015, el imputado de homicidio había ido a pescar junto a otros dos amigos paraguayos. En esa noche, le escribieron mensajes e hicieron llamados al celular de la víctima.
EL TESTIMONIO DE LA MADRE
Silvia Elizabeth Ciccolini, madre de Ludmila, fue la primera testigo en subir al estrado para ser interrogada en este juicio. Ciccolini contó que el domingo 20 de diciembre de 2015 salió de su casa alrededor de las 21 y que se iba a dirigir a un kiosco, nunca regresando. "Ella salía y venía con las bolsitas de golosinas" rememoró.
Contaba con certificado de discapacidad y cobraba pensión por tal motivo y la describió como una persona reservada aunque comentó que recibía mensajes de texto habitualmente. El fiscal le consultó cómo iba vestida y dijo que iba con calzas y una blusa, calzando alpargatas. Ludmila era mamá de una niña que en el momento del asesinato tenía siete años.
Silvia sostuvo que "más de una o dos horas no tardaba. Al llegar a las 12 de la noche ya me empecé a preocupar. Traté de comunicarme por el celular pero no recibía contestación. Ella estaba concurriendo al secundario en la Escuela Media 5 (al lado de la escuela primaria número 40). Todos la querían muchísimo".
En cuanto a la relación con su hija la describió como una madre que se preocupaba por su hija y nunca se ausentaba por más de dos horas.
Silvia sostuvo que la noche del domingo se fue en moto. "Ella me decía voy al kiosco, pero no se cuál", relató Silvia Ciccolini respondiendo una consulta puntual de los integrantes del tribunal.
LA DECLARACION DE UN EMPLEADOR
Darío Osmar Forconi fue el segundo testigo -cerca de las 11.40- quien subió al estrado. No conocía a la víctima pero sí a Quiñones Chiñolis quien trabajó en la construcción de su casa en un predio de Costa Verde, unos cinco o seis meses antes del homicidio de Ludmila, hecho que conoció por los medios digitales y le preguntó a Maidana -uno de los albañiles- sobre el hecho quien le contó que no sabía si había sido Quiñones o no pero le contó que en una rueda de amigos, tomando mate que él sabía dónde estaba el cuerpo y que lo iban a encontrar.
Sobre el hecho en sí, el albañil le contó que había sido tras una discusión, que se cayó y se golpeó la cabeza. Además contó que Salomón -otro de los albañiles- le había dicho que no le convenía ir a declarar.
Salomón era el jefe de la obra y los demás paraguayos eran sus empleados.
Quiñones pintó dos habitaciones en la casa del testigo y trabajó durante quince días. "Eran buenos trabajadores. Parecían gente de confianza", indicó Forconi.
La madre de la víctima contó que la joven era discapacitada y cobraba una pensión, Tenía una hija de 7 años. El empleador de Quiñones Chiñolis dijo que el capataz de la obra le sugirió no decir nada cuando fue llamado a declarar por la policía ante el fiscal.
En el inicio de la parte testimonial del juicio se dio lectura a la declaración de Alberto Quiñones Chiñolis ante el fiscal Terrón, días después del homicidio quien contó que condujo a Ludmila a un domicilio donde la estaban esperando Nuñez Ibarra y González Letih quien discutió con la joven, la empujó, golpeó contra la pared y comenzó a apuñalarla, asustándose los otros dos y decidieron llevarla a un basural. En el lugar, Nuñez Ibarra penetró el cuerpo de la joven ya sin vida y posteriormente se fueron del lugar.
Gonzalez Leith también declaró ante el fiscal idénticas circunstancias pero no acompañó a Nuñez Ibarra y a Quiñones Chiñolis a llevar el cuerpo de Ludmila al basural, sino que se fue a dormir.
Por pedido de la defensa se dieron lectura a declaraciones que oportunamente hicieron los imputados de encubrimiento ante el fiscal Terrón en plena etapa investigativa. El homicidio de Ludmila ocurrió en una vivienda de avenida Padre Respuela al 370 donde vivían -temporariamente- Nuñez Ibarra y González Leith. Ludmila había ido en moto hasta esa dirección, donde concurrió el domingo por la noche. Todos los imputados estaban trabajando en el momento del hecho en una obra en construcción en calle Caseros.
Ludmila, a quien conocían como Lucía, ya era conocida por los hombres imputados en este juicio oral. A ella la llamaron y le enviaron mensajes de textos en esa noche del domingo 20 de diciembre de 2015. El cuerpo de la joven fue encontrado al día siguiente, lunes 21.
Otra de las piezas documentales pedidas por el defensor oficial Silvio Acerbo, quien lleva la causa de Nuñez Ibarra, fue la declaración de su defendido que ya había estado dos veces con Ludmila antes de la fecha de homicidio. En la tarde del domingo 20 de diciembre de 2015, el imputado de homicidio había ido a pescar junto a otros dos amigos paraguayos. En esa noche, le escribieron mensajes e hicieron llamados al celular de la víctima.
EL TESTIMONIO DE LA MADRE
Silvia Elizabeth Ciccolini, madre de Ludmila, fue la primera testigo en subir al estrado para ser interrogada en este juicio. Ciccolini contó que el domingo 20 de diciembre de 2015 salió de su casa alrededor de las 21 y que se iba a dirigir a un kiosco, nunca regresando. "Ella salía y venía con las bolsitas de golosinas" rememoró.
Contaba con certificado de discapacidad y cobraba pensión por tal motivo y la describió como una persona reservada aunque comentó que recibía mensajes de texto habitualmente. El fiscal le consultó cómo iba vestida y dijo que iba con calzas y una blusa, calzando alpargatas. Ludmila era mamá de una niña que en el momento del asesinato tenía siete años.
Silvia sostuvo que "más de una o dos horas no tardaba. Al llegar a las 12 de la noche ya me empecé a preocupar. Traté de comunicarme por el celular pero no recibía contestación. Ella estaba concurriendo al secundario en la Escuela Media 5 (al lado de la escuela primaria número 40). Todos la querían muchísimo".
En cuanto a la relación con su hija la describió como una madre que se preocupaba por su hija y nunca se ausentaba por más de dos horas.
Silvia sostuvo que la noche del domingo se fue en moto. "Ella me decía voy al kiosco, pero no se cuál", relató Silvia Ciccolini respondiendo una consulta puntual de los integrantes del tribunal.
LA DECLARACION DE UN EMPLEADOR
Darío Osmar Forconi fue el segundo testigo -cerca de las 11.40- quien subió al estrado. No conocía a la víctima pero sí a Quiñones Chiñolis quien trabajó en la construcción de su casa en un predio de Costa Verde, unos cinco o seis meses antes del homicidio de Ludmila, hecho que conoció por los medios digitales y le preguntó a Maidana -uno de los albañiles- sobre el hecho quien le contó que no sabía si había sido Quiñones o no pero le contó que en una rueda de amigos, tomando mate que él sabía dónde estaba el cuerpo y que lo iban a encontrar.
Sobre el hecho en sí, el albañil le contó que había sido tras una discusión, que se cayó y se golpeó la cabeza. Además contó que Salomón -otro de los albañiles- le había dicho que no le convenía ir a declarar.
Salomón era el jefe de la obra y los demás paraguayos eran sus empleados.
Quiñones pintó dos habitaciones en la casa del testigo y trabajó durante quince días. "Eran buenos trabajadores. Parecían gente de confianza", indicó Forconi.
Crimen de Ludmila Bazán: Arrancó el juicio oral
Hay cuatro imputados. Todos de nacionalidad paraguaya. Uno sólo está acusado de cometer el crimen de la joven en diciembre de 2015. Los demás están imputados de encubrimiento.
A las 10.25 de este miércoles, dio comienzo el juicio oral por el homicidio de Ludmila Bazán ocurrido a fines de diciembre de 2015. Se desarrolla en el cuarto piso, sala de audiencia del Juzgado Criminal Oral 1. El principal imputado es Gustavo Silvestre Nuñez Ibarra, de nacionalidad paraguaya, mientras que hay otros tres paraguayos acusados de encubrimiento: Luciano González Leith, Alberto Antonio Quiñones Chiñolis, Patrocinio Pérez Sanabria.
El fiscal de este juicio y que llevó adelante la investigación, el doctor Sergio Terrón, dijo que va a acreditar el brutal hecho donde fue asesinada Ludmila Bazán, con cuatro imputados en diferentes grados de responsabilidad. El principal hecho, número uno, imputado a Nuñez Ibarra, es el hecho ocurrido en Feliz de Azara (continuación) en el camino viejo a Agustín Roca que costea las vías del ferrocarril en cercanías del Parque Industrial, consistente en el asesinato Ludmila Ayelen Bazán. Gonzalez Leith está imputado por facilitar coartada falsa al imputado, Pérez Sanabria a su vez está imputado por descartar el teléfono celular en proximidades de la localidad de Cucha Cucha en el partido de Chacabuco y Quiñones Chiñolis se lo acusa de colaborar en la desaparición de las pruebas del delito.
Este último ayudó al imputado del homicidio a llevar el cuerpo de la joven asesinada al basural quien indicó que tratará de probar la inocencia de su defendido y especificó que existen declaraciones vagas y poco precisas sobre el momento de ejecución del hecho y la presencia o no de otras personas como partícipes secundarios.
El defensor oficial del imputado del asesinato de Ludmila Bazán es Silvio Acerbo, mientras que los imputados acusados de encubrimiento y colaboración son defendidos por los abogados Torrens y Mastropierro.
El doctor Torrens quien defiende junto a Mastropierro a los otros tres imputados de encubrimientos, los que estaban en libertad, destacó el hecho de que el trío aceptara concurrir a la audiencia del juicio y adelantó que solicitará la absolución de los tres y eventualmente un cambio de calificación en el delito que se los acusa. "El hecho es uno solo con distinta participación de las personas que han intervendio", señaló el abogado.
Hay cuatro imputados. Todos de nacionalidad paraguaya. Uno sólo está acusado de cometer el crimen de la joven en diciembre de 2015. Los demás están imputados de encubrimiento.
El fiscal de este juicio y que llevó adelante la investigación, el doctor Sergio Terrón, dijo que va a acreditar el brutal hecho donde fue asesinada Ludmila Bazán, con cuatro imputados en diferentes grados de responsabilidad. El principal hecho, número uno, imputado a Nuñez Ibarra, es el hecho ocurrido en Feliz de Azara (continuación) en el camino viejo a Agustín Roca que costea las vías del ferrocarril en cercanías del Parque Industrial, consistente en el asesinato Ludmila Ayelen Bazán. Gonzalez Leith está imputado por facilitar coartada falsa al imputado, Pérez Sanabria a su vez está imputado por descartar el teléfono celular en proximidades de la localidad de Cucha Cucha en el partido de Chacabuco y Quiñones Chiñolis se lo acusa de colaborar en la desaparición de las pruebas del delito.
Este último ayudó al imputado del homicidio a llevar el cuerpo de la joven asesinada al basural quien indicó que tratará de probar la inocencia de su defendido y especificó que existen declaraciones vagas y poco precisas sobre el momento de ejecución del hecho y la presencia o no de otras personas como partícipes secundarios.
El defensor oficial del imputado del asesinato de Ludmila Bazán es Silvio Acerbo, mientras que los imputados acusados de encubrimiento y colaboración son defendidos por los abogados Torrens y Mastropierro.
El doctor Torrens quien defiende junto a Mastropierro a los otros tres imputados de encubrimientos, los que estaban en libertad, destacó el hecho de que el trío aceptara concurrir a la audiencia del juicio y adelantó que solicitará la absolución de los tres y eventualmente un cambio de calificación en el delito que se los acusa. "El hecho es uno solo con distinta participación de las personas que han intervendio", señaló el abogado.
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